Una serie un tantito absurda, pero en el fondo graciosa e incluso bonita. Muy en resumen, este es el harem oficial y definitivo de un personaje masculino, un poquito ecchi, pero más romántico que otra cosa.
Rentaro es un chico al que rechazaron 100 veces. Él, desesperado, visita un santuario para pedir el deseo de tener una novia. El problema -o solución- es que el dios del amor le concede el deseo de darle no solo una novia, ¡sino 100! Una por cada rechazo. Es así como cada vez que conozca a una de sus almas gemelas el amor surgirá entre los dos y si... Se separan, esta chica morirá, así que ¿qué opción más tiene Rentaro? Simplemente rendirse y dedicarse a sus amores.
La "maldición" es real, porque apenas Rentaro se cruza con dos chicas, estas caen rendidas a sus pies. Todo es rarísimo, porque ambas se enamoran de él, y a su vez él tiene sentimientos fuertes por ambas. Hakari, la primera chica, es la típica chica linda, amable y femenina, mientras que Karane es una total tsundere.
Más tarde, Rentaro conoce a Shizuka, la chica más tímida del planeta, que incluso no puede emitir palabra si no es escrita. Ellos también caen flechados, y Rentaro le ayuda a superar sus miedos y le da ideas para tener una mejor comunicación. Es la primera "tercera" novia que es presentada al par del principio.
En cuarto lugar, el chico conoce a Nano, con quien solo se cruzan y el amor florece. Sin embargo, lo más importante para Nano es la eficiencia, y a pesar de estar enamorada de Rentaro, considera que el amor y las relaciones son muy ineficientes (o sea, una pérdida de tiempo). Él intenta demostrarle que está equivocada, que el amor vale la pena y al final, ella decide aceptar.
Kusuri es la siguiente, una chica apasionada por la ciencia, que realiza extraños experimentos. Uno de estos es el que la convierte en una niña pequeña, aun más pequeña que la tierna Shizuka, y al tomar el antídoto que la regresa a la normalidad, su cuerpo es el de una chica mucho más voluptuosa. Al conocer a Rentaro, obviamente se enamoran.
A estas alturas, las novias de Rentaro son amigas, se quieren y cuidan, y Rentaro les da todo el amor del mundo, tratándolas con el mismo cariño y dedicándose a ellas. En realidad, es un buen novio, por lo que al momento de rescatar a Hakari, quien fue obligada por su madre a terminar con él, él lo da todo, y ellas lo apoyan porque "son familia". La gran sorpresa al conocer a Hahari, la madre de Hakari es que... ¡Es su nueva alma gemela! Así que la familia se agranda.
Hasta ahí llegan las novias de Rentaro en esta temporada, pero faltan muchas, muchas aún, y sinceramente no sé cómo lo hará después jajaja. Aunque seguramente será una buena pareja, y todas las chicas se llevarán bien. En resumen, así es este anime, bastante divertido y con novias y más novias.
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