Al fin me decidí a subir todas las fotos del viaje! (Sí, veinte años más tarde)...
Bueno, no tengo demasiado que contar que el mundo ya no sepa, pero siento que es entretenido mostrar las cosas desde mi punto de vista, y cómo se vivió este inesperado, apresurado y mágico viaje a la tierra de los sueños: Japón.
Jake se prepara para el primer viaje en avión de su vida, sin entender un carajo nada, con mucho miedo y un inglés (y japonés) de mierda. Pero allá vamos, a entregarle en las manos esos bellos vinos al señor inspiración.
Primera parada: Toronto, Canadá.
Si en su vida pueden viajar en una clase que no sea la más económica, háganlo. Subirse a un avión es mucho más agradable de lo que me hubiese imaginado, pero los asientos son un problema, al menos al principio.
No tengan miedo en el aeropuerto, si se ponen nerviosos creerán que son terroristas, porque la idea de que simplemente no sepan inglés no existe (ironía, pero es cierto, aunque solo tuve problemas aquí por mi hermoso inglés).
Lo más bello de los aeropuertos es que siempre hay buenos asientos para las interminables horas de espera, baños limpios, electricidad y wifi.
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| Aeropuerto Toronto, Canadá |
Qué emocionante resulta ser todo la primera vez que se hace, ¿alguna vez me acostumbraré a la sensación? Recorrí poco el aeropuerto de Canadá, porque seguía nerviosa y preferí pasar mis horas metida en internet buscando ayuda psicológica de mis seres queridos.
El camino hacia Japón fue mucho más tranquilo para mi, tanto que Jake fue conmigo. En poco tiempo, me había relajado mucho y realmente disfrutaba del momento.
Ir en la ventana es ideal, y las pantallas del avión tienen entretención para todas las horas. A esas alturas me liberé bastante y comenzaba a ganar confianza en mi misma. Incluso pedí sake jajaja... Al estar casi llegando a la isla, me inundó un sentimiento de "no puedo creer que esté acá", estoy segura que sollocé disimuladamente...
Mi primera parada en el país del sol naciente fue el aeropuerto de Haneda, Tokyo, para hacer escala y luego ir a Nagoya... Un par de horas aquí y ya todo era algo particular. Estaba fascinada.
El juego comenzaba recién aquí. Incluso, ese "Domestic Connecting Flights" del cartel me trajo un problemita que resolví rápido pero que igual me produjo unos segundos de pánico, porque al menos el 10% de mi experiencia en Japón fue pánico jajaja, es mi problema por ser descuidada!
"Domestic Connecting Flights", para tomar un autobús que te lleva a otra terminal dentro del aeropuerto para tomar vuelos locales.
Baño. Es simplemente imposible que no llame la atención, la foto lo dice todo(?) Lo maravilloso de Japón es que hay baños en todos lados, metros, casi todas las konbini (tiendas abiertas las 24 horas), etc. y gratuitos, como el derecho humano que es.
Dinero. Cuidado con malgastar rápidamente! A mi se me hizo difícil el hecho de valorar que tenía billetes de aprox. $6000 CLP e incluso $60.000. Esos mil yenes eran como mil pesos para mi cabeza tonta en algunas ocasiones y después despertaba y pensaba "carajo, gasté demasiado!" Lo mismo con las monedas. Aconsejo tener siempre monedas, para comprar aguas en las máquinas por ejemplo, pero cuidado con las monedas de 1 yen, yo me llené de ellas jajaja.
Consejo con respecto al dinero que todo el mundo te dirá: cambia tus pesos a dólares en Chile y al llegar a Japón cambias tus dólares a yenes.
Si eres como yo, te llamará la atención a mil... todo jajaja. Pero en serio, las tiendas son lindas, completas y con un toque kawaii, todo tiene un toque kawaii y es fascinante ver cosillas que te gustan o de las que has escuchado siendo usadas ahí como algo tan normal. Algo que no pasaría en mi país con artistas, series o cosas por el estilo. Es parte de la magia de Japón.
Mi primer alimento fue esa bebida de yogurt deliciosa que amé de inmediato, con trocitos. FamilyMart podría ser mi konbini favorito... quizás. En las konbini tienes todo para sobrevivir por un buen tiempo. Las amo.
Próximo post: Nagoya.
